NELLY REGALA PLANTONES
NELLY SIEMPRE CON LOS NIÑOS : PILCOMAYO
RECITAL PARA LOS NIÑOS DE HUANCAYO NELLY MUNGUíA
Nacida en el distrito de Corculla, antes provincia de Parinacochas, hoy Paucar del Sara Sara, emigró cuando tenía dos años de edad hacia Lima juntamente con sus padres y hermanos.
Empezó a cantar desde muy niña, haciéndolo en la Iglesia Desamparados de Breña donde formaba parte del coro infantil.
Con el transcurrir del tiempo iba captando los aires musicales de tierra adentro que los ayacuchanos tocaban y cantaban en el local institucional de los parinacochanos, donde vivía la familia Munguía San Miguel. Pero también otros ritmos y melodías provincianas llegaban a su oído infantil a través de los programas radiales que por la mañana se encargaban de transmitir nostálgicos y alegres huaynos para los cada vez más numerosos migrantes que llegaban a Lima.
En sus primeros años de adolescente decide integrar un grupo de danza, pero más puede su deseo de cantar y lo hace interpretando huaynos huancaínos, y preferentemente las melodiosas y cadenciosas mulizas.
Sin embargo, ella toma conciencia que su voz (que va muy bien con la muliza) también podría adecuarse a los nostálgicos huaynos ayacuchanos, y así decide.
Entonces, los emblemáticos “Huérfano pajarillo” y “Adiós pueblo de Ayacucho”, adquieren en la tesitura singular de Nelly, un matiz especial que es reconocido inmediatamente por quienes gustan de la música ayacuchana particularmente.
AL SILENCIO DE LA NOCHE - Yaravi
A esos dos temas le siguen innumerables temas que adquieren una dimensión especial cuando son interpretados en quechua. Y es que el runa simi en la voz telúrica de Nelly Munguía se hace dulce y reflexivo.
Pero, los años pasan y Nelly no sólo desea cantar los temas sentidos de las congojas andinas, sino también decide ser portadora del mensaje esperanzador para no ahogarse sólo en los sufrimientos, aún éstos sean los compañeros penitentes de los migrantes.
A esos dos temas le siguen innumerables temas que adquieren una dimensión especial cuando son interpretados en quechua. Y es que el runa simi en la voz telúrica de Nelly Munguía se hace dulce y reflexivo.
Pero, los años pasan y Nelly no sólo desea cantar los temas sentidos de las congojas andinas, sino también decide ser portadora del mensaje esperanzador para no ahogarse sólo en los sufrimientos, aún éstos sean los compañeros penitentes de los migrantes.
PUNTO DE QUIEBRE
A fines de los ochenta decide asumir una actitud artística que tome en consideración la defensa de la vida de nuestro planeta, y funda la Asociación de Ecologistas CANTO VIVO, conjuntamente con otros compañeros artistas populares y amigos profesionales.
Desde entonces se impone una cuidadosa selección de su repertorio musical el mismo que responde a su identificación con la defensa de la vida y de los valores humanos, así como de la naturaleza.
Entonces, el año 1992 en el Teatro Municipal de Lima, pone en escena el espectáculo denominado “Tukuymi mudan” (“Todo cambia”) que recibiera elogiosos comentarios de la prensa especializada.
Al año siguiente, ascendiendo artísticamente es acompañada por la Orquesta Sinfónica Nacional bajo la dirección del ilustre maestro coscoruna Armando Guevara Ochoa, recital denominado “El canto vivo de Nelly Munguía” que fue repuesto por tres años consecutivos.
Los viajes al extranjero no se hicieron esperar para sus presentaciones artísticas. De igual manera su compromiso con el medio ambiente la hace participar continuamente en numerosos eventos representando a su organización Canto Vivo.
Nelly, radica en San Francisco (EE.UU.), pero se da tiempo para regresar a Perú anualmente tres veces como mínimo para dar sus acostumbrados recitales y participar en las campañas ambientalistas de su organización.
Es así como en el mes de setiembre último estuvo en el valle del Mantaro liderando la reforestación del distrito huancaíno de Orcotuna, actividad que la realizó con los niños lugareños (como siempre), luego de brindar su recital “Canto a la vida” al aire libre, acompañada de la excelente orquesta típica “Súper Selecta Hermanos Mucha”.
Próximamente se presentará el 15 y 22 de noviembre en la Derrama Magisterial. Luego regresará a San Francisco para retornar a nuestro país en el mes de febrero y preparar un ciclo de recitales con la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil e Infantil que dirige el maestro Wilfredo Tarazona. El ciclo de recitales se llevará a cabo en el mes de mayo de 2008.
Cabe mencionar que el repertorio de canciones que actualmente ofrece Nelly Munguía, como ella dice, está cargado de “poesía, amor y esperanza”. En consecuencia busca afanosamente que su público sea juvenil e infantil para quienes tiene dos poemas de Gabriela Mistral y que Nelly los musicalizara pensando en las madres y los niños. Dichos poemas son: “La madre triste” y la ronda de niños “Dame la mano”.
http://es.youtube.com/watch?v=r5eRIrko6uE
Y es que para Nelly, cantar temas folclóricos no sólo es un asunto musical exclusivamente técnico, sino además es un problema de índole cultural.
Y es que para Nelly, cantar temas folclóricos no sólo es un asunto musical exclusivamente técnico, sino además es un problema de índole cultural.
1 comentario:
SABOR A JAZMÍN Y A VIOLETAS , GERANIOS Y MARGARITAS
Nelly Munguía San Miguel ya no es la misma artista que vi hace unos quince años en el Teatro Segura de Lima. Tampoco yo soy el mismo. Crueldad del tiempo.
Menudita y enfundada en un conjunto negro con vivos rojizos, parecida a estas artistas mejicanas que dan serenatas en Lima, sin embargo no defrauda a las expectativas que se han congregado en El Brisas (Qué difícil ha sido localizar este restaurante ubicado en un Polígono de Alcorcón - Madrid). Nelly es puntual como toda artista seria. Y la Munguía lo es. Se anuncia que ha asumido un compromiso de respeto con la naturaleza y así lo confirma en su breve repertorio. Conserva esos conmovedores giros de voz que nos dejan con un nudo en la garganta ante las tragedias personales y desgarros a los que alude en sus canciones. Esta presentación no tiene la amplitud de un concierto. Serán unas seis canciones coreadas con frenesí por entusiastas damas, chicas guapas en su mayoría. Agrega al final una canción con versos a la infancia, tomados – según lo indica - de la poetisa chilena Gabriela Mistral. Casi nada de las “fuertes” canciones de antaño. Y se despide saludando a la complacida asistencia.
Sin embargo parece que algo faltara en el ambiente. Y así es. De pronto una sabrosa Charito Piquer anuncia el retorno de Nelly para complacer un pedido especial.
Y vuelvo a escuchar después de mucho tiempo la canción que dice ahí vamos a ver, de Cinco esquinas, de Huanta, de la entrada de los Sinchis y el lamentable resultado de su intervención, que de seguro no era su objetivo, y del desafío final del pueblo entre carajos multitudinarios con sabor a pólvora y dinamita.
A pesar de lo hermosa que puede sonar a muchos esta canción – Flor de Retama – creo que la venerable Nelly debe reconsiderar la permanencia de este tema en su repertorio popular. De hecho, pertenece a un tiempo difícil pero ya pasado y superado por los peruanos. El escucharlo conmueve y seguirá conmoviendo, pero a la vez escarba dentro de las miserias vitales a que nos llevan las posiciones extremas donde intervienen además – reconózcanlo o no - grandes dosis de fanatismo. Las pérdidas lamentables se han producido en todos los lados, y la educación peruana mantiene su accesibilidad a las clases mas necesitadas. Es seguro sí, que sacrificios como los de los estudiantes huantinos hayan servido, aunque sea de manera temporal para hacer reflexiones positivas en torno a la universalidad en el acceso al sistema educativo. Este es un permanente caballito de batalla en todos los lugares del mundo, y sus retoques en cada cambio de gobierno son detalle obligado. Mejoras y retrasos, estos últimos cuando se trata de desvirtuar las acciones del gobierno anterior. Sobre el tema, es necesario cerrar heridas. Para ningún ser humano es misión agradable atentar contra similares, sean estos estudiantes, o sean custodios del orden en sus diferentes cuerpos.
Y canciones como esta, hacen renacer rencores y recrear enemigos que nos será difícil vencer por estar dentro de nosotros. Y lo que es mas: pueden perturbar nuestra convivencia y desarrollo. Como se dijo antes, pertenece a otra época. Ahora nos preocupan otras misiones más constructivas. Es bueno sólo aquello que sirva para unirnos como peruanos. Aquello que tenga un verdadero aroma a flores del campo, sanas y acogedoras, aunque sean temporales. Sabemos que se renuevan para bien.
Las fervorosas aclamaciones por parte de las damas se confunden al final con aplausos más discretos y uno que otro silbido censor por parte de los varones. ¿ Diferencias entre idealismo y realismo?, ¿ O entre directores y actores?, ¿feminismo y machismo?. Vaya Ud. a saber.
Madrid, Octubre 2007
eloylima@yahoo.co.uk
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